¿Cuanto le cabe a mi corazon?

Alguna vez estando solo me pregunte cuanto le cabia a mi corazon y pensaba en cuanto dolor, en cuantas cosas buenas, en cuantos recuerdos y olvidos, me preguntaba cuanto era capaz de aguantar sin estallar en mil pedazos.

Me puse a pensar y a sentir todo lo que me habia pasado desde niño, desde los malos tratos fortuitos y esporadicos de mis padres, los regaños de mis maestros, el rechazo de mis amigos, los golpes, las lagrimas, las caidas y las decepciones infantiles.

Me puse a recordar los dias de kinder, la verguenza con mis maestros que no me tenian paciencia, el dia que me separaron de mi mejor amigo, el dia que la maestra Mirna se rio cuando le dije que habia dibujado a mickey mouse y me dijo que estaba bien feito, recuerdo el beso de la prima de adrian, recuerdo los gritos de don tacho su abuelo.

Las malas cara de crucita y las vecinas cuando jugabamos en sus banquetas, empece a recordar hasta la gente que hace tantos años habia olvidado, recorde casi todos los 6 años de primaria y sus vivencias, la secundaria y sus decepciones, de como tuve que callar la ilusion que tenia por mi mejor amiga ya que a mi mejor amiga le gustaba mi mejor amigo como la fui siguiendo hasta la preparatoria solo para perderla para siempre, recorde despues las frustraciones estudiantiles, las peleas emocionales, los amigos por dinero y por conveniencia, en ese punto mi corazon latia ya sin control y la angustia estaba invadiendome inevitablemente...

Recorde el adios de Isabel (España) ese adios que me costo tanto entender a pesar de que sabia que iba a pasarme, recorde la cara de Maribel en el pasillo del edificio de inegi cuando iba a enfrentarse sola contra los jefes que la acusaban, recorde luego los dias y noches interminables y la lucha contra los demonios de polvo blanco de quien yo considere una persona importantisima en mi vida, recorde las decepciones y los reclamos de mis amigos y mis padres y de como todos me abandonaron en mi busqueda de la felicidad para alguien mas.

En ese momento me quede solo, nadie apoyaba mi cruzada y sin embargo no me rendi, mi corazon aun tenia aguante para muchas cosas mas, se habia forjado en el dolor constante y en las decepciones diarias, mi vida parecia una mala novela de un escritor tragico y absurdo sin embargo era mi vida y era la unica que tenia, asi que luchaba por ella con uñas y dientes y aunque a veces perdia la batalla y recogia mis pedazos del suelo, en unas horas estaba listo para enfrentarme al dragon de nuevo.

Me di cuenta que mi corazon tenia una capacidad inmensa para el dolor y me creia invencible cuando de pronto vino a mi el golpe mas fuerte que pude haber recibido, mi estandarte cayo... mis bandera no ondearon ese dia, no salio el sol, fue un dia de febrero cuando murio mi inspiracion, mi torre, mi punto de apoyo contra la muerte no pude ser invencible... mi abuela habia dejado de respirar en febrero el mes que me vio respirar por vez primera hace tantos años...

Ahi supe que no era de roca, que tambien el dolor podia traspasarme los tuetanos, acepte mi condicion humilde y mortal y entendi que no solo vivia para resistir el dolor si no para disfrutar de la felicidad que tantas veces habia dejado escapar por sentirme paladin de la justicia y alguien dispuesto a no ser tan feliz como cualquier otro.

¿Que cuanto le cabe a mi corazon me pregunte? pues le cabe todo lo malo, los malos ratos, las malas caras, tus desprecios y tu olvido, incluso tu odio le cabe tambien ...

Pero tambien le caben tus sueños, tus sonrisas y tus anhelos, tu magia y tus caricas, tus miradas, tu pelo, los abrazos de la gente que me quiere y de la gente que me necesita, el amor de los niños que veo cada que me pinto de payaso, la sonrisa de los adultos cada que atiendo sus palabras, me cabe la esperanza de que este mundo tiene mas cosas buenas que malas, me caben los 5 minutos que me regalas cada mañana, en fin hay suficiente espacio para todo lo bueno que me paso, me pasa y esta a punto de pasarme...

Me cabe mi Fe que es enorme y me cabe la humildad de reconocer que no soy mas que tu quien quiera que seas, me cabe en el corazon la maxima de que un dia ya no estare aqui, pero tambien se que tu corazon es tan grande como el mio y que seguro vivire en el.